La ansiedad es un trastorno que puede ser mitigado con actividad física. Pacientes sedentarios que comienzan a realizar ejercicio regularmente pueden experimentar una reducción significativa en los síntomas de ansiedad. La actividad física libera endorfinas, que son químicos que mejoran el estado de ánimo y reducen el estrés. Además, el ejercicio puede servir como una distracción saludable para las preocupaciones y pensamientos negativos que contribuyen a la ansiedad.